Una laica redentorista
Conchita es un fruto de la Iglesia y, sin la iglesia, sería imposible hablar de la ella. Hoy, su recuerdo sirve para manifestar la vitalidad eclesial. Por otra parte, el…
Conchita es un fruto de la Iglesia y, sin la iglesia, sería imposible hablar de la ella. Hoy, su recuerdo sirve para manifestar la vitalidad eclesial. Por otra parte, el…
Conchita Barrecheguren García, nace en Granada el 27 de noviembre de 1905. Su padre, Francisco Barrecheguren Montagut, es de Lérida y desciende de una familia vasco-catalana. Su madre, Concepción García…
El sábado 6 de mayo tendrá lugar en la Catedral de Granada la Beatificación de la Venerable Sierva de Dios, Conchita Barrecheguren, hija del también Venerable, P. Francisco Barrecheguren, Misionero…
Llevamos mucho tiempo en la Iglesia hablando de la centralidad de la misión (Pablo VI, Evangelii Nuntiandi, 1975) y de la importancia de la (nueva) evangelización (Juan Pablo II, Redemptoris…
La Pastoral Juvenil de la Provincia Europa organiza la experiencia “Navidad Oblata 2022. Tiempo de creer: una luz en el horizonte” para chicas y chicos de 18 a 35 años que deseen…
Los redentoristas anunciamos el Evangelio desde comunidades misioneras, dinámicas e insertas en su entorno que viven en diálogo con la sociedad de hoy.
Hay 17 comunidades misioneras en España.
El anuncio de la Buena noticia del Evangelio es tarea fundamental de los redentoristas que de palabra y obra llevan la abundante redención de Jesucristo a los hombres y mujeres de hoy.
El carisma redentorista supone un compromiso claro con los más desfavorecidos. El anuncio de salvación de Jesús toca toda la realidad humana, toda la persona, con sus pobrezas y posibilidades.
La misión de evangelizar hoy inicia pronto, desde las edades más tempranas. Allí se puede hacer la siembra de la buena semilla que da frutos de Vida y plenitud.
Acompañamos todas las etapas de la vida adulta y del compromiso cristiano de fe. Ofreciendo también el carisma misionero en la vida laical.
Desde San Alfonso, el anuncio de la salvación de Cristo en nuestra misión, implica también el estudio y la enseñanza de la teología moral. Nuestra fe debe ser profundizada, pensada y orada para ser anunciada.