La Virgen Madre

La Virgen Madre

‘La Virgen Madre’ es un libro sobre la Virgen María, que ocupa un lugar que es imposible de sustituir en la experiencia religiosa de San Rafael de Arnáiz, el autor. Para Arnáiz, la Virgen es su camino hacia Dios. De Ella recibe ayuda, luz, consuelo, y con Ella mantiene unas relaciones de confianza, sencillez y ternura del todo filiales.

La referencia explícita a la Virgen María ocupa un lugar que no es posible sustituir en el corazón de Rafael ni en su experiencia religiosa. Además del rezo, había la costumbre de venerar a la Virgen en devociones añadidas como podían ser la de colocar su imagen en una rinconera de la casa y encender una candela, hacer un a plegaria en silencio, darle un beso o ponerle una flor, recibir domiciliariamente una capillita portátil con la imagen de la Virgen en una de sus advocaciones.

En medio de su trabajo de empaquetar chocolate, el famoso chocolate de la Tapa, continuó rezando Avemarías hasta siempre y siguió desgranando el rosario que aprendió en su hogar.

En el libro, se recogen los siguientes capítulos: la Santísima Virgen es para San Rafael, San Rafael es para la Santísima Virgen, acordarse de María, amor, ayuda y protección, cantar a María, cielo, confianza, hablar de María, Inmaculada, madre, Dios te salve, María, mediadora, ofrecimiento, rezar a la virgen, la salve y sufrir con María.

En su capítulo Rezar a la Virgen, incluye lo siguiente: “Pedía a la Virgen que fuera conmigo y me acompañara y guiara mis pasos, mis últimos pasos, entre los hombres. Cuando flaqueo me acuerdo de ella, y como sé que me está esperando allá en el monasterio, solo el pensarlo me da fuerzas para seguir y sigo”.

Y concluye con: “Mi corazón a los pies de tu cruz lo pongo, Señor; está junto al de María”.