21 Mar Rezar en Cuaresma – 22 marzo 2013
Canto: Dios que nos amas, tu perdón y tu presencia
son en nosotros una fuente de alabanza.
SALMO 17,2-3a.3bc-4.5-6.7
ANTÍFONA: En el peligro invoqué al Señor, y me escuchó
Yo te amo, Señor; tú eres mi fortaleza;
Señor, mi roca, mi alcázar, mi libertador.
Dios mío, peña mía, refugio mío, escudo mío,
mi fuerza salvadora, mi baluarte.
Invoco al Señor de mi alabanza
y quedo libre de mis enemigos.
Me cercaban olas mortales,
torrentes destructores me aterraban,
me envolvían las redes del abismo,
me alcanzaban los lazos de la muerte.
En el peligro invoqué al Señor,
grité a mi Dios.
Desde su templo él escuchó mi voz,
y mi grito llegó a sus oídos.
ANTÍFONA: En el peligro invoqué al Señor, y me escuchó
LECTURA DEL EVANGELIO: Juan (10,31-42)
En aquel tiempo, los judíos agarraron piedras para apedrear a Jesús.
Él les replicó:
– «Os he hecho ver muchas obras buenas por encargo de mi Padre: ¿por cuál de ellas me apedreáis?»
Los judíos le contestaron:
– «No te apedreamos por una obra buena, sino por una blasfemia: porque tú, siendo un hombre, te haces Dios.»
Jesús les replicó:
– «¿No está escrito en vuestra ley: “Yo os digo: Sois dioses”? Si la Escritura llama dioses a aquellos a quienes vino la palabra de Dios (y no puede fallar la Escritura), a quien el Padre consagró y envió al mundo, ¿decís vosotros que blasfema porque dice que es hijo de Dios? Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis, pero si las hago, aunque no me creáis a mí, creed a las obras, para que comprendáis y sepáis que el Padre está en mí, y yo en el Padre.»
Intentaron de nuevo detenerlo, pero se les escabulló de las manos. Se marchó de nuevo al otro lado del Jordán, al lugar donde antes había bautizado Juan, y se quedó allí. Muchos acudieron a él y decían:
– «Juan no hizo ningún signo; pero todo lo que Juan dijo de éste era verdad.»
Y muchos creyeron en él allí.
PETICIONES:
- Te pedimos por los hombres y mujeres perseguidos por causa de su fe y que se sienten como abandonados, para que encuentren fortaleza en la oración.
- Te pedimos por todos los que se sienten abandonados por Dios y por los hombres, para que aprendan de nuevo, a través de gente buena que se les acerque y les acoja, que Dios les ama y ellos están en sus manos.
- Te pedimos por nuestros hermanos, religiosos y laicos, de las comunidades de Mérida, Salamanca y Astorga, concédeles tu paz y tu fuerza para que sigan fieles a la misión.
PADRE NUESTRO.
AVE MARÍA.
COMPROMISO: Convéncete de que eres amad@. Por eso Dios te dio la vida y Jesús entregó la suya.
ORACIÓN FINAL.
Aquí nos tienes, Señor, reunidos por Ti.
Necesitamos tu presencia.
Ven, sigue con nosotros.
Enséñanos lo que hemos de hacer,
muéstranos el camino.
Sé el inspirador de nuestras decisiones.
No permitas que faltemos
ni al respeto ni a la justicia.
Que la ignorancia no nos pierda
ni el afecto nos engañe.
Únenos a Ti para que seamos una sola cosa
y caminemos en la verdad.