“Vivir la profecía en el exilio” Comienzan los ejercicios espirituales con Mons. Silvio Báez

“Vivir la profecía en el exilio” Comienzan los ejercicios espirituales con Mons. Silvio Báez

Como cada año, durante la primera semana de septiembre, los redentoristas han sido convocados en el Monasterio de El Espino para hacer el retiro de inicio de curso.

En esta ocasión, Mons. Silvio Báez, carmelita descalzo y obispo auxiliar de Managua, es el encargado de animar la reflexión y la oración. El tema propuesto ha sido el profetismo como experiencia fundamental de los seguidores de Jesús de Nazaret. Centrado en el profeta Ezequiel –un profeta en el exilio– iremos recorriendo y desgranando la vida de un mediador de Dios.

La grandeza del profeta, de los hombres  de Dios, está en que no hay distintivo exterior, privilegios o conjeturas… lo único que hay es la voz de un hombre débil que habla en nombre del Señor.

Los  profetas son lámparas que iluminan la historia de la humanidad. Además, lo típico de la vida consagrada no es la radicalidad sino lo profecía, la existencia de un redentorista tiene sentido cuando ella sola habla de Jesús.

Por otra parte ­–ha señalado Mons. Silvio Báez– una Iglesia o una sociedad sin profetas se vuelve cruel, se olvida de los últimos porque mata la voz de Dios.

En un cambio de época, en un mundo que genera exiliados y excluidos, más que nunca, se necesita la voz del profeta.